Bjorn Antonio Torrico Terrazas nació en Cochabamba (Bolivia) allá por los años 80’ pero la vida hace ya tiempo que lo trajo a Andalucía, y más concretamente a Loja (Granada), su nueva tierra adoptiva. Aquí conoció a Shirley, su mujer, que, paradojas de la vida, también es boliviana. Y aquí también nacieron años después sus dos hijos Ezequiel e Isaac.
Antonio, aunque había cursado algunos cursos de arquitectura antes de venir a España, en su afán por seguir aprendiendo y prosperar, decidió continuar aquí sus estudios eligiendo el Instituto Hermenegildo Lanz de Granada para cursar Formación Profesional en la especialidad de Delineante Proyectista, sin que el hecho de tener que desplazarse cada día esos 50 km de distancia mermase su ilusión, ni tampoco la necesidad de tener que combinar las tareas académicas propias junto con las laborales.
Nuestro estudio de GR Arquitectos ha tenido la inmensa fortuna de que sus tutores (José Joaquín y Juan Pablo Pérez Aguilera) le propusieran realizar con nosotros las prácticas académicas. En total han sido apenas cuatro meses divididos en dos periodos, en 2022 y ahora en 2023, un tiempo más que suficiente para madurar como profesional… Pero hoy no toca hablar de eso, sino del regalo que ha supuesto su presencia y su ejemplo para todos nosotros.
Porque Antonio no solo se ha ganado nuestro respeto y aprecio. Ha sido en realidad mucho más que eso, ya que ha supuesto un honor haberlo tenido como compañero, brillando con su sencillez entre todos nosotros por su maravilloso carácter, siempre educado, servicial, muy trabajador y atento a los demás.
Por el azar de la vida, además tuvimos la fortuna de vivir como espectadores de excepción del nacimiento de su segundo hijo, y nunca olvidaremos la mañana en la que toda la familia vino a compartir con nosotros una deliciosa “torta del altiplano” para mostrarnos su felicidad.
El jueves pasado ya terminó su paso por www.gr-arquitectos.com y precisamente mañana empezará un nuevo ciclo en el servicio de urbanismo del Ayuntamiento de Loja… y no se me ha ocurrido mejor manera de desearle lo mejor de lo mejor en nombre de todos nosotros desde las páginas de La Ciudad Comprometida, compartiéndoos las letrillas que Antonio me dejó en su despedida:
- Buenos días Kika, muchas gracias por todo. Me sentí muy a gusto con vosotros. Una linda experiencia. Me hubiera gustado agradecer a Juan Carlos en persona. Ya me pasare en cualquier momento. Te comparto lo que quería subir en su página de internet, pero no encuentro donde escribir. Que estén bien, saludos:
"¡Una experiencia enriquecedora! Así podría definir mi paso por García de los Reyes Arquitectos. Agradecer el recibimiento, el trato del equipo, la profesionalidad con la que asumen el trabajo es encomiable, en verdad muy agradecido y contento por esta experiencia. Sobre todo, agradecer a su fundador Juan Carlos García de los Reyes, por la nobleza, la sencillez y el carisma que tiene como persona. Es la cabeza de una gran familia de profesionales muy competentes en todo momento.”
Un abrazo muy grande buen amigo Antonio, y la mejor de las fortunas para ti y tu linda familia.